Para comenzar entraremos un poco en la historia del velo de novia, así te enteras de donde viene este accesorio tan tradicional; desde cuando se usa y por qué.

En la antiguedad era normal que se usara un velo sobre la cabeza de la novia, para asegurar la boda sin que el novio tuviese la oportunidad de ver la cara de la consorte, que pudiera ser poco atractiva. Otras culturas lo usaban para demostrar que la novia sería una esposa sumisa y obediente. En la época medieval era una forma de proteger a la novia de los malos espíritus, pues se creía que las fuerzas negativas eran atraídas debido a la felicidad de la novia. En el judaísmo y el cristianismo era y sigue siendo el símbolo de pureza y virginidad, el hecho de que el velo cubra la cara y luego el novio lo levante para besarle, se toma como significado  que él será el único que podrá poseerla sexualmente y que ella sumisamente “pertenecerá” a su esposo en cuerpo y alma como un amor verdadero.

En la actualidad, el velo va perdiendo importancia, pues la pureza (tómese como virginidad) no es vital. Por esto es que el velo ya no cubre el rostro y se usa más que nada como un accesorio por tradición sin mayor significado que complementar el vestido de la novia.

Ya te hemos contado algo sobre el velo, ahora te guiaremos sobre su elección y tipos de velos,  que cada vez  se  dejan mas  de usar, dando paso a un simple tocado, elegante y sofisticado.

Luego de una incansable búsqueda,  pruebas, mirar catálogos y visitar tiendas, etc., por fin tienes tu vestido de novia elegido, ese que lucirás el día de tu boda y te hará sentir radiante frente a tu novio e invitados. Sin embargo, entre todos los complementos que formarán parte de tu look, hay uno muy importante y fundamental: el velo o tocado de novia. Por esa razón te daremos algunos consejos para que a la hora de elegirlo no cometas ningún error y sea  perfecto según tu vestido, las características de tu rostro y tu personalidad.

En primer lugar es muy importante analizar cómo es tu vestido: si es estilo romántico o clásico, el velo, en este caso, puede ser con encajes y bordados o algún otro detalle que dé realce a tu vestido. Por el contrario si tu vestido es muy sofisticado o elaborado, te recomendamos un velo estilo sobrio, liso, sin detalles, así tu vestido se llevará el 100% del protagonismo y no te veras muy recargada. Existen diferentes tipos de velos, según tu personalidad, si eres de las novias que les gusta la majestuosidad, puedes llevar un velo muy largo (hay hasta de 3 a 4 metros de largo) o doble, donde la parte más larga va por debajo de la corta. También puedes optar por un velo corto hasta la cintura o si eres más audaz un mini velo hasta los hombros, este tipo de velos es especial para recogidos o pelo muy corto.

En lo que se refiere a tocados, actualmente existen unos maravillosos y muy sofisticados (estilo años 50) confeccionados en plumas, tul, perlas, flores, plata, etc. Se llevan solos por lo que acá el velo queda totalmente excluido y son ideales para recogidos, semi recogidos o pelo con grandes ondas,  con mucho volumen, aunque para este tipo de peinado también puedes elegir una corona de flores, ideales para una novia muy juvenil y sencilla.

Para las novias de rostro redondo recomendamos un recogido muy firme con un tocado de buena confección en pedrerías y perlas, sin mucha ostentación, de tamaño regular y si prefieres con una pequeña malla que te semi cubra el rostro.

Para las novias de rostro delgado, ideal es el pelo suelto con un peinado voluminoso y un velo importante, sujeto con una diadema o una semi corona donde sujetes el velo muy bien para que no caiga.

Es importante mencionar que una vez finalizada la ceremonia y terminada la sesión fotográfica, y haya comenzando la celebración debes quitarte el velo y poner en tu pelo una pequeña coronilla o un tocado cómodo y también de pequeño tamaño; la idea es que no te incomode durante la cena o baile.

Esperamos haber aportado positivamente en esta serie de ideas que debes tener en cuenta al momento de la elección y saber con qué te sentirás más cómoda y auténtica. ©